A ella va dedicado este poema.
santa
carmen sallés, educadora y contemplativa
La semilla sembrada en buena tierra,
muriendo a sí misma, dio su fruto,
entregada a la causa que eligiera
de acercar, educando, Dios al mundo.
Ser mujer no supuso en su carrera
obstáculo insalvable en modo alguno:
fue más fuerte la Fe que la certeza
de una lucha sin tregua en el futuro.
En el trabajo fue contemplativa,
viendo a Dios en las niñas que educaba;
llenando de oración la vida activa
y ofreciendo su acción cuando rezaba,
es ejemplo de muchos con su vida
y su entrega serena y abnegada:
hoy la Iglesia se alegra en este día,
presentándola al fin canonizada.
José García
Velázquez
Segovia, 21
de octubre de 2.012
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