jueves, 19 de enero de 2012

Potencial de la mente


Cada uno de nosotros es capaz de todo lo bueno y de todo lo malo,según su albedrío y las circunstancias en las que esté,según se deje llevar o no por la Providencia,...
Pero sin duda nuestra apuesta tiene mucho que ver con lo que acaba siendo nuestra vida,a pesar de las dificultades con las que nos encontremos...

¡POTENCIAL DE LA MENTE!

Potencial del alma humana,
capaz de lo más grande
y de lo más rastrero, de entrega
completa por los otros
y de egoísmo
radical y estéril.
¡Potencial de la mente!

Lo que somos,
lo que podemos ser,
lo que los demás creen que somos...

Si el hombre asciende
a lo más noble,
le es posible llegar
hasta la mística más sublime
y es capaz de Dios.

Puede andar en falso,
dejar libres los sentidos
y aparece el animal
que cada uno
llevamos dentro.
Angel o demonio:
todo es posible,
para esta criatura
que, pudiendo ser feliz,
se complica la vida
por sus fantasmas.

Culturas, situaciones
que parecen absolutas;
circunstancias
que parecen influir
definitivamente
en el devenir del hombre.
Pocos saben
que, por encima de todo,
pueden ser libres,
aunque las condiciones de vida
sean difíciles
y todo parezca
estar en contra...

¡Poder de la mente!
¡Hombres, mujeres!
Lo más destructivo
- guerras, torturas,
plagas apocalípticas,... –
no es capaz de dominar,
de romper la dignidad
del que se sabe
humano,
capaz de sonreír
en el dolor
y de olvidar el sufrimiento
para darse al otro.
Y, sin embargo,
comodidad,
blandos asientos,
estómagos repletos,
necesidades satisfechas,
cierran al hombre
en sí mismo,
le aburguesan.

Neurótico,
paranoico,
el más leve revés
se le hace un mundo
y le atemoriza,
atenaza su ánimo
y le impide pensar,
le paraliza
y oculta las soluciones.
Si se mira el ombligo,
todo aparece negro,
el mundo hostil,
la vida un peso
insoportable,
que ahoga con el dolor
cualquier apariencia
de felicidad.

Sentimientos nobles
de amistad,
de entrega;
disponibilidad
que abre anchos caminos
a la audacia
y llena de luz
la vida,
de alegría
las dificultades
que nunca faltan,
consustanciales,
compañeras en el día a día
de pequeños éxitos,
para quien sabe disfrutar
el pequeño detalle:
una sonrisa,
un saludo amable,
un rayo de sol
en un día con negros nubarrones.
¡Y todo en la mente!
¡Siempre en la mente!

Con todo en contra,
aquel se hace hombre,
madura
y es capaz de crecerse
ante lo adverso,
mientras hay otros
que se hunden y
pierden confianza,
incapaces de llegar
a ser adultos,
a soportar la responsabilidad
de sus errores.

Toda una sociedad
puede perderse,
arrojarse al vacío,
arrastrada por ideas negativas,
que lastran el alma
e impiden
disfrutar
lo que la vida
tiene de bello.

Toda una sociedad,
puede entregarse
a ideales de belleza,
de convivencia,
de vivir con el otro,
ganando, día a día,
lo mejor
para el presente
y el futuro.
Y, lo mejor de todo,
es que la voluntad,
el espíritu creativo,
la entrega,
lo mejor de todo,
están ahí,
en la mente,
formando parte de nosotros,
siendo nosotros,
el rostro más amable
de nosotros mismos.

¡Esta es la grandeza!
Que, a pesar de todo,
de nosotros depende
- de ti y de mí –
que la vida sea
una aventura maravillosa
o una amarga
pesadilla.
¡Potencial de la mente!

José García Velázquez

Segovia, noviembre de 2001

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