Vuelve a nosotros tus ojos

Aunque seamos mayores y aunque estemos más o menos lejos de la Fe, siempre queda en nosotros ese cariño a la Virgen...¡menos mal!



VUELVE A NOSOTROS TUS OJOS

Si vuelves la vista atrás,
desde que eras solo un niño,
has luchado por llegar
lo más alto que has podido;

a veces la incomprensión
se ha cruzado en tu camino
y puede ser la razón
de hacerte como granito:

las experiencias ayudan
en casos a madurar,
otras veces son absurdas
si ves que domina el mal;

y ahora que ves el vacío
de tu mundo material,
te acuerdas de tus inicios
y del amor maternal.

Recuerdas esa oración
que aprendiste de tus padres
y vuelves con ilusión
a la Virgen, a rezarle…

¡Qué tendrás, Virgen María,
que hasta el corazón más duro
termina volviendo un día
a tu regazo seguro!

José García Velázquez

Molinoviejo (Segovia) sábado, 22 de enero de 2011