...Algunas personas consiguen su meta, de poderse quedar en España, en mejores o peores condiciones.
Si todo sale bien, intentan reunir a sus familias con ellos...
V) … O, POR FIN, ESPAÑA.
Sólo unos pocos romperán el cerco
y llegarán a las ciudades europeas,
descubriendo la dureza de la vida
de los que están sin trabajo ni papeles,
explotados a veces por sus propios compañeros
que se organizan en mafias sin escrúpulos,
olvidando que un día ellos vivieron
el mismo drama y los mismos miedos,
en medio de una sociedad
completamente ajena a su cultura.
Si has tenido la fortuna de llegar,
e incluso de integrarte en esta tierra,
es fácil que el recuerdo te atormente
y no quieras revivir ese pasado
en el que te jugaste todo
para poder aspirar a algo más digno;
quizá no quieras acobardar a otros
que preparan en este momento su aventura,
si hicieras como dice la Escritura:
“Que los que navegan en el mar
cuenten sus peligros,
y al escucharlos nosotros
con nuestros propios oídos,
quedaremos atónitos”.
Ya de nuevo en contacto con los tuyos,
para ellos son tus pensamientos,
los planes de un futuro quizá juntos,
los frutos de un trabajo duro
y el deseo de tenerlos a tu lado,
para empezar acaso una vida nueva…
José García Velázquez
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