viernes, 15 de octubre de 2010

Discutir y tener razón


Subo ahora 2 poemas, escritos en diferente momento, sobre los peligros de tener razón en una discusión del ámbito que sea...pues si sabemos que tenemos la razón, se lo hacemos pagar a nuestro opositor una y otra vez. Por lo menos esa es mi percepción...¿o no?.

¡VES COMO TENÍA RAZÓN…!

Como una tuneladora,
como un martillo pilón,
es la mente destructora
de aquel que tiene razón;
una y otra vez perora
ante cualquier ocasión,
con cantinela sonora,
repitiendo su versión.

El desgraciado que ignora
de un tema la solución
y sigue la seductora
senda de la discusión,
es el que más tarde llora
sin recibir compasión,
por más que pide e implora
del vencedor su perdón.

José García Velázquez
Salamanca, 18 de julio de 2009

PELIGROS DE LA DISCUSIÓN

Cuando hay una discusión,
siendo o no tema espinoso,
no hay nadie más peligroso
que aquel que tiene razón:
verás que una y otra vez
te lo refriega en la cara
y cuando crees que ya para,
lo ves con fuerza volver;
no te pille distraído,
que lo suele aprovechar
para hacerse sin piedad
leña del árbol caído.
Durante una temporada,
cada vez que salga el tema,
recordará que el problema
es una cuestión zanjada:
que era suya la razón
al que le escucha dirá…
¡al fin más te dolerá
que un sonoro pescozón!

José García Velázquez
Santiago (en el autobús), 11 de octubre de 2010

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