Recuerdos del Pazo de Libunca

Hace años, el Pazo de Libunca, en Narón, A Coruña, fue lugar de reunión con amigos y de vivencias que quedan en la memoria con personas de Ferrol, que han dejado honda huella en nuestros corazones. Este poema es un pequeño homenaje para todos los que de una u otra forma compartimos esta aventura. 










RECUERDOS DEL PAZO DE LIBUNCA

Confluyeron en Narón

dos voluntades en una

el año que aquí invirtió

un gallego su fortuna.

Del proyecto se encargó

un arquitecto de altura:

puso esfuerzo e ilusión

en el Pazo de Libunca;

eran tiempos de Art Decó,

modernista arquitectura

y de la decoración

que hasta nosotros perdura.

De Talavera llegó

ceramista Ruiz de Luna,

famoso en su profesión

de cerámica y pintura,

maestro de luz y color,

que en los zócalos encumbra

las costumbres con primor

de la Galicia profunda;

hasta el jardín se adornó

con escenas que rezuman

de esta tierra lo mejor

por su alegría y ternura.

En el Pazo transcurrió

parte de nuestra aventura

con amigos de Ferrol

que en la memoria perduran;

quedan en el corazón

recuerdos de las figuras

de amistad y buen humor,

anfitriones de hidalgura.


         José García Velázquez

         Segovia, 18 de junio de 2025


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